El Monasterio de Veruela, al pie de la sierra de
Moncayo, es el primer monasterio cisterciense de Aragón, fundado en 1146, por
Pedro de Atarés en tiempos de Ramón Berenguer IV. De más está decir lo
sorprendente de su estado de conservación y la belleza del paraje. En él vivió
en 1864 Gustavo Adolfo Bécquer, afectado de tuberculosis y acompañado por su
hermano, el pintor Valeriano Bécquer. Fue allí donde escribió sus Cartas desde
mi celdas y parte de sus Rimas y leyendas. Una exposición traza la vida y obra
del escritor romántico con bastante claridad y justeza. El claustro,
perfectamente conservado, del monasterio, sorprende por su armonía y la unidad
estilística. Las diferentes dependencias monacales (incluyendo la iglesia) se
conservan en excelente estado. Veruela ha sido otra de las gratas sorpresas de
este viaje a lo largo y ancho de Aragón.
La entrada al Monasterio de Veruela.
El sepulcro de López Ximénez, siglo XIII, Monasterio de Veruela.
En el claustro del Monasterio de Veruela, Aragón.
La sierra de Moncayo nevada