El Archipiélago del Rosario a menos de una hora de la costa caribeña colombiana es un verdadero paraíso natural, protegido por la denominación de Parque y Reserva Natural. Aquí hay 27 islas (algunas privadas y otras tan pequeñas que sólo cabe en ellas una casa). Todas hermosas, conservadas, naturales. El agua turquesa, cálida, libre de ciclones y huracanes que nunca llegan hasta aquí pues la Sierra Nevada de Santa Marta los repele. Una de esas islas (la llamada San Pedro de Majagua) era propiedad del artista francés Pierre Daguet, desde 1955 hasta su muerte. Todos sus bienes (varias propiedades en Cartagena) los dejó para disfrute de los pobres. Nuestra isla se llama del Pirata y es una maravilla. Tiene incluso mangales y güirales. En la cocina la negrita Lala cocina un arroz con coco con patacones y pargo frito como nunca me lo había comido. En la isla somos, entre visitantes y personal, unos 20. Cada cual va a su aire y puede alquilar barcas para moverse por el archipiélago. Deberíamos haber venido mínimo un mes...
Zarpamos en dirección del archipiélago del Rosario. Atravesaremos la bahía de Cartagena atrás la ciudad y pasaremos delante de los fuertes de San José y San Fernando que protegen a un lado y otro la entrada de la bahía.
La Virgen del Carmen, en medio de la bahía de Cartagena, protectora de navegantes.
El pueblo de pescadores de Tierra Bomba, en la bahía de Cartagena.
Camino del archipiélago del Rosario, antes de salir mar afuera, en la entrada de la bahía de Cartagena el Fuerte de San Fernando despide al marinero.
Isla San Quintín, archipiélago del Rosario, Colombia..
El islote de la izquierda, compuesto sólo de una casa semigeométrica se llama irónicamente "El Latifundio" y fue propiedad del pintor colombiano Alejandro Obregrón (1920-1992).
Isla Caguamo. Archipiélago del Rosario. Colombia.
La sirena de la isla del Pirata. Colombia.
En la Isla del Pirata hay un güiral. Hacía años no veía una mata de güira (totumo, dicen los colombianos), una de las pocas frutas musicales. Para los visogodos tal vez valga la pena añadir que de aquí salen los güiros y las maracas.
La escultura de la sirena y "Paco", un pelícano de verdad, nos dan siempre la bienvenida cada vez que regresamos a la Isla del Pirata.
Unos amigos peruanos dan a mi madre la receta de la salsa para las papas a la huancaína en este justo instante y en el mar.
"Vamos con Dios" y "No hay como Dios", las barcas que nos llevan a las islitas Caguama y Bonaire.
Desde la Isla del Pirata, el cayo Bonaire. Archipiélago del Rosario. Colombia.
En Isla Grande, una de las 27 islas del archipiélago del Rosario, una mansión de inspiración morisca.