6 janv. 2009

Cafés bruns y Coffee shops / Amsterdam

En Amsterdam hay tres tipos de cafés: los "bruns", los blancos y los "coffee-shops". Las dos primeras fotos corresponden a un ejemplo de café "brun": el Papeneiland, una verdadera institución pues, como todos los cafés de esta categoría, llevan hasta cuatro siglos de existencia y poco han cambiado desde que fueron fundados. El Papeneiland data de 1642 (!!) y su nombre significa "Tierra de papistas" pues en la época de persecusiones religiosas le salvó la vida a no pocos católicos que pudieron escapar gracias a un pasadizo que desde el café, pasando por debajo de la calle y del canal, les permitió alcanzar la otra orilla. La atmósfera intimista, el claroscuro natural del espacio, los mosaicos de Delft, el mobiliario rústico, nos recuerdan las escenas de interiores en los lienzos de Frans Hals y de Rembrandt.





Luego, están los célebres coffee shops, de los que todo el mundo ha oído hablar. En casi todas las cuadras hay uno. En ellos la marihuana y el hachís (amén de otros productos) constituyen la principal atracción. Muchos de ellos ofrecen una amplia gama de hasta 30 tipos de marihuanas diferentes. Los vendedores suelen ser bien explícitos en cuanto al efecto exacto de cada yerba. Si lo que se busca es desternillarse de la risa, el marihuanero (o sea, el vendedor en cuestión) le aconsejará sin equivocación. Si lo que quiere es quedarse como un mongo durante horas pensando en las musarañas pues también le dirá cuál es la que le va. Y así hasta el infinito de las sensaciones deseadas. Este célebre coffee-shop en que estuvimos es el célebre De Dampkring, cuyo interior psicodélico aparece en el filme Ocean Twelve. Las fotos en la pared de Brad Pitt, George Clooney, Matt Damon, y el elenco completo dan fe de lo muy bien que la pasaron durante la filmación.




Por último uno de los cafés "blancos", más recientes y que pueden ir desde la cervecería típica hasta una sala moderna y desing como la de cualquier lugar del mundo. La cervecería 't Arendsnest, en el barrio Jordaan, ofrece (nada más) 150 tipos de cerveza holandesa y es un buen ejemplo de esta tercera variante.