300 años de las Ediciones Stock / París

¡Qué noche la de anoche! Se dice fácil pero en un mundo en que las casas editoriales surgen hoy y desaparecen mañana celebrar los 300 años no es cosa de juegos. Las ediciones Stock, la más antigua de todas las que existen en Francia, ha festejado esta noche sus tres siglos de existencia ininterrumpida. En 1708, un tal André Cailleau funda, en el Quartier Latin, la casa parisina. Inicialmente sólo publica panfletos religiosos poco osados pero cuando el negocio cae en manos de su yerno, el catálogo se enriquece con Rousseau, Voltaire, Restif de la Bretonne, etc. La viuda de este último hereda el negocio en 1765 y comienza a editar – ¡oh Francia! – a las feministas del siglo XVIII, atravesando, ¡ilesa!, la tormenta de la Revolución de 1789. El próximo heredero navegará en las aguas turbias del Consulado, del Imperio y de la Restauración…, y los que le siguen, en el lodazal de las dos guerras mundiales del siglo pasado. Cabe decir que la casa ostenta veinte Premios Nobel y se distingue como pionera de la edición de literatura extranjera a través de su vieja colección "La Cosmopolite". Hermosa y legendaria historia de perseverancia la de Stock que ha celebrado en el salón "Le Globo" sus 300 años de aventuras literarias. Al final descubrí por qué Stock ha descubierto el secreto de la perennidad: cada aniversario lo festejan ¿saben cómo? : ¡bailando! Y es verdad que en Le Globe esa noche, todos, hasta los que cortan el bacalao, bailaron y sin parar. Champagne y baile, baile y champagne. Ésa es la receta parece. Ahí les dejo alguna que otra foto del dancing de Stock y un grand merci por invitarme.