7 févr. 2009

Monasterio de Yuste - Extremadura

Pernoctamos en Cuacos de Yuste, un pueblecillo del Valle de la Vera, al pie de la Sierra de Gredos (nevada en este tiempo) y a 5 kms. del Monasterio de Yuste. En Cuacos creció el Infante Juan de Austria (se piensa que por esa razón Carlos V eligió tan recóndito paraje para pasar los últimos años de su vida). El Hotel de la Abadía es una sucesión de casas típicas extremeñas y no sólo ofrece un cuadro auténtico y de buen gusto sino que la "tenanciere" es amabilísima.
El monasterio está en manos de monjes jerónimos y sólo permiten visitar los jardines, la sala de audiencia, la antecámara y los aposentos de Carlos V, la iglesia y, de refilón, mirar el primer claustro. Una pena que el claustro plateresco sea para disfrute exclusivo de los jerónimos. El cuarto (lúgubre y austero) del Emperador conserva sus muebles y una cama desde la cual, aquejado por la dolorosa gota, Carlos V veía el altar de la Iglesia. Evidentemente, el sitio que rodea al manostario, la vegetación, los eucaliptos, el estanque, la vista de los parajes rocosos camino de Garganta de la Olla, son inolvidables. Toda la región de La Vera también. Aquí dejo algunas fotos de Yuste y una divertida sugerencia en el azulejo de su entrada principal.

Vista de la Sierra de Gredos desde Cuacos de Yuste.

Vistas del Monasterio de Yuste









5 févr. 2009

Museo de América - Madrid

El Museo de América. Tenía pendiente visitarlo y fui a ver lo que hay allí hoy.

Uno de los temas obsesivos y recurrentes de la pintura colonial americana es el mestizaje. De este tipo de obra existen varias series en México y Perú. Siempre resulta gracioso leer lo que escribe el artista. En este caso Luis de Mena da 8 combinaciones de mestizaje. Por ejemplo, "de española y mulato nace morisca", o "de morisca y español nace albino tornatrás (el equivalente cubano es "salir atrasado o echar para atrás"), "de mestiza e indio nace lobo", etc.

Este es un detalle de uno de los enconchados de la serie "Tablas de la conquista de México", de fines del XVII. La parte que fotografié es la de la captura del último príncipe azteca por el conquistador García de Holguín, fundador del Holguín del Oriente cubano, sobre el cual un día, si tengo tiempo y me acuerdo, haré un post.

Uno de los óleos de la serie de 16 escenas de mestizaje pintadas por Andrés de Islas, en México, en 1774. Esta es muy graciosa pues dice que "de cambu(x)o e india nace tente en el aire" (me pregunto qué es "tente en el aire"), al lado hay otro muy graciosa y dice "de chino e india nace cambu(x)o".

Vicente Albán, un pintor de Quito, hizo este óleo en 1783. Su título es "Yapanga o prostituta de Quito" y en la leyenda el pintor aclara que "con el tra(g)e que usa esta clase de mu(g)eres que tratan de agradar".

Walker Evans - Fundación MAPFRE - Madrid





Una exposición de más de 100 fotografías del norteamericano Walker Evans. Vale recordar que, en 1933, Evans, por encargo del periodista Carleton Beals realizó un reportaje fotográfico en la Cuba de Machado para el libro de Beals The crime of Cuba. Entre las fotos de la muestra hay seis de esta serie cubana. Las restantes, en su mayoría, son de Nueva York y del Sur de Estados Unidos. Las de Alabama y los negros y guajiros del Sur son extraordinarias. Como la moda es prohibir que se saquen fotos les dejo la portada del cuadernillo (que es una de las fotos de Evans en Cuba) y las de las vallas publicitarias de la exposición. Intenté, "malgré l´interdiction", sacar una de la que muestra un cine de La Habana en 1933 pero me salió borrosa, sepia y peor que un daguerrotipo quemado (la subo igual).

Símbolos franquistas

He leído en algún lado que por acuerdo aprobado por el Consejo de Ministros del Reino, el pasado 31 de octubre, el Gobierno retirará los símbolos franquistas que permanezcan (30 años después!) en los edificios propiedad del Estado, excepto de aquellos que posean un significado histórico, artístico o arquitectónico. Espero que quiten esta tarja al caudillo de España (si la agrandan verán que así mismo dice) bajo el frontón del edificio del Ejército del Aire (a la salida del metro Moncloa). Aunque me imagino que al final de la jugada encontrarán que todas las tarjas y demás loas tienen un valor histórico, simbólico o artístico...

"Lumbres...", por María Sangüesa



Aquí dejo el texto escrito (y leído el día de la presentación) por la escritora María Sangüesa con respecto a mi poemario.

LUMBRES VELADAS DEL SUR
María Sangüesa

Lumbres veladas del Sur es un poemario que irradia belleza y sensualidad. En él, William Navarrete, ha conseguido crear una fuerte corriente que arrastra nuestra mente, nuestro espíritu, hacia otro espacio, hacia otros ámbitos ajenos a nuestra realidad occidental. Nos introduce en un mundo luminoso cargado de voces y de aromas, de paisajes habitados por gentes que viven y se mueven en un laberinto de calles sinuosas, de plazas pobladas de sonidos que se expanden en un estallido multicolor, donde el sol o la luna alumbran cantos y conversaciones, impregnadas de esos olores únicos, a especias y a perfumes extraños, que hacen del aire de Marruecos una parte más de su inigualable paisaje y acentúan su intangible misterio.
Sus poemas parten de la maravillosa ciudad de Marraquech para ir abriéndose a sus territorios circundantes.

Creo que debo mencionar algo sobre la historia de este lugar, puesto que toda ella ha ido perfilando el patrimonio artístico y cultural de esta singular ciudad. Marraquech es una urbe de origen beréber, fue la ciudad que le dio nombre al país en el que se alza: Marruecos. Aunque podemos decir que su auténtico origen, en realidad, permanece oculto en el misterio, se especula con la posibilidad de que éste sea caucásico, e incluso se le ha vinculado, por la rareza de su lengua semítica, con el pueblo vasco… ¡quién sabe!

Durante el Imperio romano, el emperador Augusto casó al heredero de la monarquía de Marraquech, Juba II, con una hija de Marco Antonio y de la mítica Cleopatra. Y, hasta que Calígula llegó a liderar el Imperio, este territorio africano mantuvo su autonomía. Más tarde, cuando el Imperio Romano cayó, se escindió en numerosas tribus muy belicosas entre sí. Hacia el siglo VIII, de nuestra era, fue sometido por el sultán de Bagdad, que tuvo que hacer frente a los numerosos levantamientos de tan indómito pueblo. No se islamizaron hasta que los árabes conquistaron Hispania, siendo su historia bastante paralela a la nuestra. Entre 1050 y 1060, Yusuf ben Tasfin, al frente de los Almorávides, se adueñó de las principales rutas comerciales y, junto a su hijo Alí ben Yusuf, importó a esta ciudad la rica cultura de Al- Andalus. De esta manera comenzó el esplendor cultural y el florecimiento artístico de Marraquech, tan imbricado a nuestro sur peninsular.

Hecho ya este pequeño apunte histórico, es William quien nos sitúa dentro de la ciudad, al pie de la cordillera del Atlas, el más imponente sistema montañoso de África, frontera entre las fértiles vegas norteñas y el desierto del Sáhara.
Su primer poema, Canto al pie de los Atlas, es como una introducción al recorrido a través del cual nos va a conducir, de la mano de su fulgente palabra, por las páginas de su libro. Me voy a permitir reproducir la tercera estrofa de este emocionante poema:

“Yo sólo siento que me fundo
lentamente, irresistiblemente,
detrás de sus miradas,
donde se esconden los juegos y las danzas
que cerca de las fuentes compartimos
ajenos a los dogmas de Los Libros.”

Desde este instante, ha conectado con el alma de la ciudad, con el espíritu de sus bulliciosas y hospitalarias gentes; se ha rendido a su encanto, y sus versos van a ir naciendo de una mirada que resulta tan intimista como deslumbrada por cuanto le rodea.

En Plegaria del sultán Ahmed Al-Mansur, para los españoles Almanzor, que fue quien en el S. XII, venció a los cristianos en la batalla de Alarcos. En este poema nos da su visión sobre la impresionante Al-Bahya y su sultán, Mulay. El lugar es de una belleza decadente y absolutamente romántica. Está formado por las ruinas de lo que fue un gran palacio y por una mezquita de increíble decoración, tanto dentro como fuera de sus muros; atravesando las ruinas del palacio se accede las tumbas Saadíes, un verdadero despliegue de imaginación sobre mármol, madera y escayola, logrando un conjunto tan espectacular que conmovió al poeta hasta hacerle escribir uno de los más intensos poemas de su obra.

Después, hace una pirueta en el tiempo para llevarnos hasta Majorelle, un palacete de estilo naïf, construido hacia 1920 por el pintor francés Jacques Majorelle, y que está concebido como una especie de ensoñación sobre el exotismo de Marraquech. El lugar, aunque puede ser visitado, es propiedad de la familia del modisto, Yves Saint-Laurent, fallecido recientemente. El poeta nos hace sentir este paisaje, hasta llegar a fundir, tanto nuestra piel como nuestro espíritu, con la armonía conseguida entre las formas desbordantes de su arquitectura, los tonos añiles de los muros, la gama de verdes y rojos de las buganvillas y la propia vida que late en su entorno…

Cabalgata de ausentes, nos desliza por los vericuetos de la medina, entre aromas a canela y azafrán, perennemente acompañados por aquellos gritos que algunas veces nos pueden parecer casi cánticos, de los mercaderes. Aquí hace una evocación muy profunda y melancólica de la imagen materna, entresacada de una cita de Abdellatif Laâbi, sobre lo inmenso de su soledad interior.

Esta soledad se acentúa en Ciudadela transida de luz pues nos sumerge en una honda reflexión sobre las mujeres y su aislamiento, tras los muros de las silenciosas casas que se extienden a lo largo de la impresionante muralla.
Su registro poético cambia radicalmente al transportarnos, en el El gran Halka, a la plaza de Jemaa-el-Fná. Centro neurálgico de Marraquech, allí se desarrolla la deslumbrante vida de la ciudad, en un variopinto derroche de mezclas de músicos, saltimbanquis, comerciantes, encantadores de serpientes, bailarines, cafés y restaurantes…Una increíble sinfonía de aromas y sonidos, de voces y cantos, a cualquier hora del día o de la noche que nos transmite bajo la imponente presencia de la Kutubia, la torre gemela de la Giralda sevillana, con una destreza poética que es todo un regalo para nuestros sentidos. Este poema lo ha dedicado a otro gran escritor, Juan Goytisolo, que, al igual que él, quedó atrapado y fascinado por la exótica y múltiple belleza de tan singular lugar.

En Rapsodia del oued Seco, ya nos sitúa fuera de la urbe. Un oued es un río que permanece seco casi todo el tiempo y que tan sólo se llena de agua cuando, muy de tarde en tarde, llueve. Su descripción del cauce convertido en erial es la más lograda que he leído nunca, así que no puedo resistirme a la tentación de reproducirla:

“Lecho de gravas, oued sin llanto,
que como un sable afilado
atraviesas el valle de laureles,
no cuentes con las lágrimas del hombre
para llenar tu garganta seca”.

Luego, el autor nos lleva hacia la orilla del mar, en el intenso poema Magia de los hierros, que es una evocación del cabo Mogador, lugar que nos describe como una ciudad dormida entre las rejas, las olas y el desierto.

En Hamman vuelve a introducirnos dentro de la vida cotidiana de Marruecos, los hammans son los baños públicos, lugares de reunión de cualquier población marroquí. Allí se toman baños de vapor entre hojas de eucalipto que aromatizan el húmedo aire, para continuar dejando que nuestros cuerpos sean recorridos por las expertas manos de unos masajistas que los ungen de aceites y esencias y nos hacen salir de allí totalmente reconfortados y renovados, siempre envueltos por el murmullo de las voces que charlan o cantan, transmitiéndonos esa vida, siempre bullente, que anida entre las paredes de las ciudades marroquíes.

Ouikameden nos eleva a las cimas del Atlas, entre imponentes cedros y abetos. Aquel paraje es hoy día una estación de esquí, donde la nieve y el paisaje alpino sorprenden a todo aquel occidental que llega hasta sus altas cumbres. Su belleza es agreste, salvaje, diferente a cualquier otro lugar del mundo donde también reinen los bosques y la nieve, ya que el desierto del Sáhara comienza cuando se desciende de sus escarpadas alturas.

Al llegar al poema Encuentro galante en La Menara, vemos que la sensualidad de los versos se desborda. La Menara es un inmenso bosque de olivos que tiene un sorprendente lago artificial en su interior, sobre éste se alza un palacio construido para una princesa de legendaria hermosura. Ante esta imagen de cuento de hadas, el poeta nos hace vivir un encuentro amoroso con la musa de tan mágico enclave. Sus palabras reviven lo que supuso aquella lejana historia de amor, pero desde la óptica de nuestro vívido presente.

El detentor de la memoria, es una sucesión de imágenes coloristas y pintorescas que reflejan el arte de vender de los habitantes del zoco, en este caso el de Smarine, sumergiéndonos entre las voces de los tahúres y jugadores que se confunden con los puestos de los mercaderes como si se tratase de un irremisible rito ancestral por el que se entrecruzan pasos y miradas a lo largo del discurrir de los siglos, y que podrían llegar a desembocar en el hastío, del que se salvan por el propio juego de la vida que transcurre bajo la luz, el color y la renovada sorpresa que aguarda, a quien camina, casi en cada esquina.

Paul Bowles en In Salah, es un hondo homenaje al este escritor que se enamoró de la ciudad de Tánger y que nos dejó una novela tan magnífica como El cielo protector. Aquí su tono se va tornando irónico al reflejar la realidad actual del lugar que este autor habitó, para hacer después un quiebro sobre la nostalgia que suscita su ausencia y el tiempo transcurrido entre sus huellas y la resonancia que éstas dejaron en lo que ya no tiene retorno, el pasado.

Jarcha de amor es un breve poema construido en esta modalidad de tan profundas raíces medievales y árabes. Podemos decir que es un cántico en toda la dimensión de su significado ya que las palabras parecen acariciar nuestros oídos como si se tratara de las notas de un laúd, mientras nos va narrando todo el esplendor sevillano, que fue trasladado a Marraquech como último vestigio de cuanto tuvo que ser abandonado en la siempre añorada Al-Andalus.

Por último, Oda marcial, es ya su despedida. En ella alude de manera firme pero también poética al monarca alauita, hasta convertirle en su interlocutor mientras le ruega, casi una oración, por su tierra y por quienes la están habitando, trenzando un canto de esperanza y de tristeza. La esperanza nos la muestra en unas imágenes de gran calidad plástica, sugiriendo un paisaje que puede ser renovado por el agua y por el verdor que ésta puede llegar a esparcir a su paso. La tristeza se nos abre ante la pobreza, la enfermedad y el descuido que imperan dentro de un patrimonio tan espectacularmente rico en cuanto a su belleza. Quiero terminar con los últimos versos de Lumbres veladas del Sur:

"...
Soy demasiado pobre
Y no puedo ofrecer
mas que este canto,
tal vez incompleto, difícil,
tal vez afónico, quizás muerto.
Tómalo tú,
que puedes transformarlo.
Y encaja para siempre,
con firmeza,
tu corona de riquezas
en mi verso".

Sólo me queda decir que William Navarrete nos ofrece con este poemario un canto rebosante de vida y de música, la de sus versos. Y que lo corona con la insuperable riqueza de sus deslumbrantes palabras.

4 févr. 2009

Fundación Alianza Hispánica - Madrid

Anoche, la presentación de mi poemario "Lumbres veladas del Sur" en la Fundación Alianza Hispánica que dirige Gloria Solás. Fue una noche muy bonita en que compartí con amigos y conocí a otros. El escritor cubano Alberto Lauro coordinó la presentación y la escritora española María Sangüesa presentó el poemario. Nadie mejor que ella que nació en Marruecos, de padres españoles también nacidos en Marruecos en épocas del Protectorado. Luego, el artista marroquí Driss Lamfarrak bailó la danza del vientre y otros ritmos de Casablanca, su ciudad natal. Quiso el azar que saliendo de la presentación cayéramos en un restaurante marroquí llamado Marraquech, a dos pasos de la Alianza Hispánica y cuyo dueño es de la ciudad a la que dedico el poemario. Por último (pues en Madrid la noche no acaba nunca) cruzamos la acera y terminamos en un bar dirigido por dominicanos en donde se celebraba el cumpleaños del Vicedirector de la ONCE. Pongo algunas fotos pues no me da tiempo para más (ni siquiera para poner todos los pies de fotos ni ordenar los nombres). Bacon en El Prado, me espera... Gracias a todos los amigos presentes por esta linda noche, DIVERTIDA de verdad. Los que no están en estas fotos los incluiré después cuando coja un break.

Alberto Lauro, William Navarrete y María Sangüesa, presentación de "Lumbres veladas del Sur".

Con Gloria Solás, directora de la Fundación Alianza Hispánica.

.Orlando Jiménez Leal, Santiago Méndez (Chago), María Elena Cruz Varela, Alberto Lauro, Cecilia Guerra, William Navarrete, Irma Alfonso - presentación de Lumbes veladas del Sur, en la Alianza Hispánica.

El bailarín y actor marroquí Driss Lemfarrak bailó después de la presentación del poemario.





3 févr. 2009

Elenco de La Cubana - Sara Montiel - Madrid

Exposición de la artista Pilar Villuendas quien ha realizado el retrato de todo el elenco de la compañia de teatro catalana La Cubana (que nada tiene que ver con Cuba, aunque en sus lejanos orígenes, en 1980, sí tuviera relación). Esto fue en Travesía y los interesados pueden ver la exposición durante el mes de febrero y aprovechar las últimas funciones de La Cubana cuya pieza Cómeme el coco, negro termina, después de dos años de exitosas presentaciones, el próximo domingo. Sarita Montiel estuvo de madrina de la noche. Con ella toda una época del cine español revive en mis recuerdos.

Con Sarita Montiel.
Con Rogelio Edwards, único actor cubano de La Cubana, delante de su retrato por Pilar Villuendas.


Sara Montiel con sus bien vividos 80 años y el elenco de La Cubana

1 févr. 2009

Monasterio de la Encarnación - Madrid


Con horarios muy jodidos (la guía obligada explicó que debido al hecho de que las monjas agustinas de clausura viven y trabajan a ciertas horas del día), el Monasterio de la Encarnación es, junto al de las Descalzas Reales, uno de los más importantes del Viejo Madrid. Lo fundó la esposa de Felipe III, Margarita de Austria, y posee uno de los relicarios mayores de España. Entre las muchas reliquias, más o menos siniestras (como de costumbre), la ampolla que contiene la sangre solidificada de San Pantaleón es una de las que goza de mayor popularidad entre los madrileños. Sucede que, cada 27 de julio, la sangre se licúa (los que han ido a Nápoles recordarán que allí sucede lo mismo con la de San Genaro, el 19 de septiembre). La guía explicó que sólo no se había licuado ciertos años, como sucedió en 1914, 1918 y 1936, en que se produjeron grandes catástrofes. Los que se aburren con todo este fetichismo católico pueden desviar los ojos hacia una de las vitrinas en que se atesora un Ecce Homo del escultor Pedro de Mena muy bien logrado.
A la salida del Monasterio, en el jardincillo donde está la estatua de Lope de Vega, este cartelito me recuerda que uno nunca termina de aprender español. No sé si la prohibición de pisar el césped está en castizo zamorano, pero me sorprende lo confuso de la misma.

31 janv. 2009

Un problema de crédito - Madrid

La verdad es que no le dieron el crédito al autor intelectual del márketing cubano en el toldo (ni abajo) de esta librería frente a La Almudena. Digo, si es cierto que el apóstol fue el primero en decir esta frase. Pues la verdad es que dijo (o sermoneó) tantas cosas (o dicen que dijo en son de sermón) que ya ni se sabe...

Magerit

Entre el 860 y el 880 el emir de Córdoba, Mohamed I, ordenó construir en la actual Cuesta de la Vega (promontorio de la vega del Manzanares), la muralla y el alcázar que dieron origen a Madrid (Magerit, es la pronunciación árabe castellanizada). Esas murallas, o más bien sus escasos restos, son el monumento más antiguo de Madrid, declarado Monumento Nacional en 1956. No voy a hacerles las historia de la Reconquista, pues ésa está en los libros y todo el mundo puede consultarla. Sin embargo, dejaré unas notas al vuelo sobre la inversión de la tendencia al pie de la próxima foto.

Eso que ven justo al lado y arriba de las viejas murallas del Madrid original es un campamento de subsaharianos llegados probablemente en pateras. Curiosamente se han instalado, como en un nuevo alcázar, en el mismo sitio en que sus vecinos del norte de Africa fundaron lo que luego se convirtió en la capital española. Por el acento me di cuenta que eran de Malí, pues si bien algunos lavaban, cocinaban, e incluso, meaban en el campamento en custión, otros permanecían apostados en la curvita de la cuesta (viendo los carros pasar, supongo), y a ésos sí los oí hablar. Decididamente, desde que Francia dejó de ser la tierra prometida le toca ahora a Madrid cambiar de cara. Lo que no sabemos todavía es si para bien o para mal.

29 janv. 2009

Presentación Lumbres veladas del Sur

Pulsar sobre la invitación para obtener las informaciones.

27 janv. 2009

Picasso et les maîtres / Grand Palais / París



Picasso et les maîtres, en el Grand Palais, cerrará dentro de muy poco. Yo no tenía muchas ganas de verla por varias razones. Tal vez la principal era que he visto suficientes originales y exposiciones de Picasso a lo largo de mi vida. O sea, que consideraba "a priori" que esta exposición no podría aportarme gran cosa. El otro argumento que me hubiera impulsado a verla hubiera sido que grandes lienzos de la pintura universal se exhibían junto a las obras del genio malagueño. Por ejemplo, La maja desnuda de Goya ha salido por vez primera de España y junto a ésta uno de los mejores Tizianos del Prado. Pero – continuaba con mis reticencias – casi todas esas obras las he visto varias veces y aunque me gusta seguir viéndolas no era argumento suficiente para aguantar el tropel de gentes (y peor: los comentarios a alta voz) que abundan en estas grandes retrospectivas.
El caso es que al final me decidí (y agradezco el empujón final al amigo Enrique José Varona quien es, además, conferencista de lujo y conoce muy bien las piezas exhibidas). La exposición es simplemente portentosa. Una de las más maravillosas que he visto. Todo un mundo de relaciones entre la obra de Picasso y los maestros que le precedieron, guiños, reinterpretaciones, copias, ejercicios lúdicos entre el español y aquellos artistas que saciaron su apetito pictórico.
Los grandes nueve temas (por salas) son:
I- Autorretratos. Aquí puede verse una parodia de Picasso por Picasso Autorretrato con peluca blanca (1897) y su primer cuadro pintado en París: Yo Picasso (1901). También un extraordinario Autorretato con paleta (de 1906, época del Bateau Lavoir, en Montmartre). Autorretratos de Delacroix, Rembrandt, Gauguin, Goya, Cézanne y El Greco complementan el tema e se interrelacionan con las búsquedas y los resultados del propio Picasso.
Yo, Picasso / 1901 (su primer cuadro de París).

II- Modelos. En esta sala, Picasso dialoga con la cultura grecorromana. Me impresionó ver la maestría de su técnica y la capacidad para dibujar y copiar con exactitud modelos del clasicismo helénico. El célebre cuadro de El Greco San Martín y el mendigo (de 1597, que se halla en la National Gal. de Washington) aparece al lado de Muchacho llevando las riendas de un caballo, de Picasso (1905, traído desde el MOMA). También dialogan en esta sala la célebre Baigneuse de Renoir con la Grande baigneuse, de 1921, de Picasso.
"San Martín y el mendigo", del Greco. Imagen tomada de www.narcissistic-etrend.com.
"Muchacho llevando un caballo", de Picasso.

III- Indigomanía. Bajo este tema se agruparon aquellas obras del período azul en relación directa con obras de El Greco y del Aduanero Rousseau. Tal vez sea la relación temática y pictórica más traída por los pelos. Debe ser porque en este asunto del azul Picasso, de tan conocido, es caso aparte. Yo siempre pensé (y sigo pensando) que el tema del azul en esta época de su vida fue una consecuencia del impacto que debió producirle el azul de los vitrales góticos de Francia.

IV- Retratos negros. Impresionante la copia que hizo Picasso, con sólo 16 años, del Felipe IV de Velásquez. En esta sección Murillo, Ribera y Zurbarán. De este último, siempre lúgubre, el cuadro que más me cautivó entre los más de 200 que exhibe la muestra: San Francisco de Asís en su tumba (1630) que vino desde un recóndito museo en Milwaukee (que de tan recóndito ni sé si así se escribe). Tres triángulos y dos esferas que son su propia cabeza (pensamiento y vida) y la calavera que lleva en las manos (muerte y trascendencia). La composición en absolutamente perfecta. De tanto serlo el cuadro, que como sabemos no puede ser otra cosa que figurativo, da la impresión de ser un preludio de la abstracción geométrica bien avant la lettre.
"San Francisco en su tumba", de Zurbarán, viaja desde el Museo de Milwaukee. Observen la composición geométrica de esta obra.

V- Tarots. Son cuadros de los últimos años de la vida de Picasso, cuando el artista no tenía ya nada que probar al mundo y se puso a pintar, libremente, lienzos que parecen afiches malos de carnaval en un pueblo del Caribe. Aparecen temas lúdicos de Manet, Martínez Mazo, enanos de Velásquez, etc.
VI- Variaciones. Bajo esta rúbrica las múltiples interpretaciones del "Rapto de las sabinas" (inspiradas del Poussin del Louvre, no de David) y realizadas por Picasso entre 1962-1963; así como de Las meninas de Velásquez y de la Infanta Margarita, del mismo, realizadas por Picasso en 1957 (unas 44 variaciones hizo, la muestra exhibe una decena). Interesante también las variaciones del David y Betsabé de Lucas Cranach.

VII- Bodegones y naturalezas muertas. Zurbarán, Luis Meléndez, Chardin, Goya, un premonitorio Cézanne de modernidad giratoria asombrosa, frente a Picasso. Luego el período sombrío del umbral de la guerra y un cuadrito-cuadrazo violento titulado Naturaleza muerta y cráneo de cordero, de 1939, que viajó desde la colección Marcos y Vicky Micha, en México.

VIII- El retrato de la pintura. Homenaje a los bebedores de ajenjo y motivos de ferias (Degas, las españoladas de Manet, etc.), la célebre Nana de Manet inspirada en la novela homónima de Zola que Manet leyó en manuscrito antes de su salida. Primera vez que este cuadro viaja a Francia desde Hamburgo en donde se encuentra. Una Arlesienne de Van Gogh sublime y Picasso lui faisant pendant.
Nana, de Manet (1977) desde Hamburgo y por primera vez en Francia.
"L'Arlesienne", de Van Gogh.

IX- Desnudos. Por primera vez fuera de España La maja desnuda de Goya. También la Venus, Amor y el organista de Tiziano. Picasso y sus desnudos atrofiados. Una odalisca gris (que nunca había visto) de Ingrès viaja desde Estados Unidos.
En total más de 200 obras de Picasso. Una colección que no podrá verse nunca en toda la magnitud con que la exhibe el Grand Palais (los ingleses la reciben pero exhiben sólo 44 obras / recuerden que en Francia estos lujos los paga el Estado y fuera de Francia otro gallo canta…). Quien ande por París que corra a verla pues sólo queda una semana. Después habrá que contentarse sólo con el catálogo.

Noticias / Nouvelles / News

Wendy Guerra gana el Premio Carbet des Lycéens 2009. La noticia aquí: Prix Carbet

Últimos días para la extraordinaria exposición Picasso et les maîtres, en el Grand Palais. Quiero escribir algo sobre la misma en próximo post.

A mi juicio delicioso post de Yoani Sánchez en su blog Generación Y: Víctima no, responsable. Todo sigue acuciando una nueva era.

Rosie Inguanzo entrevista a la actriz Lili Rentería tras su reciente viaje a La Habana en Tumiami Blog. Veo vasos comunicantes con el post de Yoani recomendado antes.

El amigo Ernesto Lozano inaugura exposición P de Pop en la galería José María Velasco, del D. F., México.

Del 6 al 7 de febrero, coloquio Paradojas del cine cubano (1959-2009) en la Universidad de Tours, Francia.

Los que quieran disfrutar del mejor jazz cubano tienen que apurarse (las entradas vuelan) para oír a Omar Sosa. Lo malo es que será en Neuchâtel, Suiza. Mais, rien n'est impossible…

25 janv. 2009

Dos reseñas: Janisset Rivero y Humberto Calzada

Dos reseñas: La primera sobre el poemario Ausente, de Janisset Rivero realizada por Olga Connor para El Nuevo Herald. La segunda por Luis de la Paz sobre Visión crítica de Humberto Calzada. Para el primero Janisset me pidió el prólogo y el segundo lo preparamos, prologamos y editamos el amigo Jesús Rosado y yo.
Enlaces:
Ausente / Janisset Rivero.
Visión crítica de Humberto Calzada / por Luis de la Paz.

Diario Las Américas, 23 de enero de 2009 - Humberto Calzada, William Navarrete, Jesus Rosado
© Luis de la Paz