Ha fallecido Sor Emmanuelle, último gran icono del catolicismo francés después de la muerte del Abate Pierre. Icono no sólo por una vida de misionera centenaria y ejemplar, sino porque no tenía pelos en la lengua y se dedicó toda su existencia, sin tregua, a los pobres. Madeleine Cinquin, su verdadero nombre, entró en la Orden de Nuestra Señora de Sion a los 22 años. Vivió 28 años en Turquía, 5 en Túnez y a los 62 años se instaló en El Cairo, en donde residía en una cabaña de 4 m2, en medio de los pobres de los suburbios cuya única fuente de ingreso era los desechos escarbados en los basureros. Junto a ellos Sor Emmanuelle escarbó basura durante 20 años, hasta que en 1993 regresó a Francia, por orden del clero, para instalarse en un Asilo del Var (Provenza) y continuar desde allí su campaña mediática y humanitaria contra la pobreza en el mundo. Al regresar a Francia, después de tantos años entre los pobres de países musulmanes dijo sentirse muy impactada al constatar la soledad y la tristeza en el rostro de la gente de su país. De humor picante y con los pies en la tierra, Sor Emmanuelle gozaba de gran popularidad y era frecuentemente invitada en los platós de televisión. Sus libros eran best sellers (Vivre, à quoi sert ?, en 2004, se vendió a 300 000 ejemplares y aún sigue vendiéndose). De hecho, el jueves próximo, saldrá, según su voluntad, su libro póstumo Confessions d'une religieuse. Sor Emmanuelle se atrevió a escribirle al Papa para exigir la autorización de la contracepción en países como Egipto (y otros del Tercer Mundo) en que las niñas quedan embarazadas a los 12 años y a los 25 ya han tenido 12 hijos. El Papa nunca le contestó porque la ortodoxia, como sabemos, vive siempre ajena a la realidad. En 1980 fundó la Asociación Asmae-Sœur Emmanuelle, laica y apolítica, dotada de un presupuesto de 3, 5 millones de euros y enfrascada en salvar 74 000 niños en Burkina Faso, India, Filipinas, Madagascar, etc. En Francia, no ha habido Presidente, hombre político o fashion people (que para el caso todo eso es más o menos lo mismo) que no haya ido a estrecharle la mano a la Hermana. Me atrevería a decir que había casi una superstición en ese gesto. Una misa en su memoria se desarrollará mañana en la Catedrale de Notre-Dame, a las 3 pm. Sor Emmanuelle pidió funerales íntimos y discretos, para decepción de periodistas y televisiones.
21 oct. 2008
Sor Emmanuelle (1908-2008)
Ha fallecido Sor Emmanuelle, último gran icono del catolicismo francés después de la muerte del Abate Pierre. Icono no sólo por una vida de misionera centenaria y ejemplar, sino porque no tenía pelos en la lengua y se dedicó toda su existencia, sin tregua, a los pobres. Madeleine Cinquin, su verdadero nombre, entró en la Orden de Nuestra Señora de Sion a los 22 años. Vivió 28 años en Turquía, 5 en Túnez y a los 62 años se instaló en El Cairo, en donde residía en una cabaña de 4 m2, en medio de los pobres de los suburbios cuya única fuente de ingreso era los desechos escarbados en los basureros. Junto a ellos Sor Emmanuelle escarbó basura durante 20 años, hasta que en 1993 regresó a Francia, por orden del clero, para instalarse en un Asilo del Var (Provenza) y continuar desde allí su campaña mediática y humanitaria contra la pobreza en el mundo. Al regresar a Francia, después de tantos años entre los pobres de países musulmanes dijo sentirse muy impactada al constatar la soledad y la tristeza en el rostro de la gente de su país. De humor picante y con los pies en la tierra, Sor Emmanuelle gozaba de gran popularidad y era frecuentemente invitada en los platós de televisión. Sus libros eran best sellers (Vivre, à quoi sert ?, en 2004, se vendió a 300 000 ejemplares y aún sigue vendiéndose). De hecho, el jueves próximo, saldrá, según su voluntad, su libro póstumo Confessions d'une religieuse. Sor Emmanuelle se atrevió a escribirle al Papa para exigir la autorización de la contracepción en países como Egipto (y otros del Tercer Mundo) en que las niñas quedan embarazadas a los 12 años y a los 25 ya han tenido 12 hijos. El Papa nunca le contestó porque la ortodoxia, como sabemos, vive siempre ajena a la realidad. En 1980 fundó la Asociación Asmae-Sœur Emmanuelle, laica y apolítica, dotada de un presupuesto de 3, 5 millones de euros y enfrascada en salvar 74 000 niños en Burkina Faso, India, Filipinas, Madagascar, etc. En Francia, no ha habido Presidente, hombre político o fashion people (que para el caso todo eso es más o menos lo mismo) que no haya ido a estrecharle la mano a la Hermana. Me atrevería a decir que había casi una superstición en ese gesto. Una misa en su memoria se desarrollará mañana en la Catedrale de Notre-Dame, a las 3 pm. Sor Emmanuelle pidió funerales íntimos y discretos, para decepción de periodistas y televisiones.