El pueblo pesquero de
Tajao. Aquí sólo vienen los de la isla pues ni siquiera aparece en los mapas. Sin embargo, es donde se comen los mejores pescados y mariscos, pues los escoge uno recién sacados de las nasas. Es mejor venir para el almuerzo pues por la noche la mitad de los restaurantes (unos diez) cierran. Tajao se halla a orillas del mar, en la hondonada de un barranco y la erosión ha construido caprichosas rocas arenosas que le sirven de abrigo natural a la aldea.