Acabo de recibir L'île des amours éternelles (La isla de los amores infinitos), la última novela de la escritora Daína Chaviano, en francés. En París se espera a Daína Chaviano con expectación. El próximo lunes 5 de mayo la Editorial Buchet -Chastel invita a un buffet cubano en su sede del barrio de Saint-Germain (7 rue des Canettes), entre 18h 30 - 20h 30. Luego, a las 21h 00 tendré el gusto de presentar a la autora junto con el editor Marc Parent y Eyda Machín, en la Maison de l'Amérique Latine (217, Bd. Saint-Germain).
La isla de los amores infinitos es una novela apasionante, de escritura y referencias históricas cuidadas. Daína verifica cada circunstancia histórica.
A los méritos de esta novela se suma una trama muy compleja, que viaja desde la China del XIX, África y las serranías castellanas de Cuenca para alcanzar la segunda mitad del XIX cubano y primera del XX hasta converger en Miami. A pesar de la terrenalidad de la historia y de su contexto, los elementos mágicos y ficticios característicos de sus primeras novelas cubanas, también están presentes en ésta. Digo, están ahí y sabemos que es una historia que corre en paralelo sin afectar el sentido auténtico de la verdadera historia cubana.
29 avr. 2008
21 avr. 2008
Ramón Rubio / William James
El matemático y filósofo cubano Ramón Rubio Agüero vivió los últimos veinte años de su vida en Francia. Falleció en 2002, en la ciudad de Saint-Étienne, entre libros, ajeno al mundanal ruido. Nos dejó una obra descomunal que es patrimonio de la filosofía y pensamiento cubanos. Durante muchos años investigó y estudió la obra de William James (1842-1910), fundador de la filosofía y la psicología norteamericanas. En su libro William James: philosophie, psychologie, religion (prologado por el profesor Jean-Claude Beaune, escrito en francés y publicado post-mortem por las Éditions L'Harmattan en su colección "Ouverture Philosophique) Rubio ahonda como nadie los temas de la Verdad, el pragmatismo, la metafísica de Charles-Sainders Peirce, la experiencia religiosa, el "yo" y la teoría de las emociones, arrojando nueva luz sobre la obra monumental y el pensamiento de James. Rubio consacró sus estudios a los fundamentos de la religión. De su fallecimiento no hubo una línea en ningún medio cubano, ni dentro ni fuera. En los franceses sí, por supuesto. Les cuelgo la portada del libro de Ramón Rubio, una de sus últimas fotos y otra de William James. Agradezco a su viuda, la excelente guitarrista Rodela Rubio las imágenes que acompañan esta nota. Nosotros que hemos estado siempre tan escasos de pensadores de envergadura deberíamos rescatar para el futuro la enjundiosa obra de este cubano.
☛William James: Philosophie, psychologie, religion
Préface de Jean-Claude Beaune
Ed. L'Harmattan, Paris, 2008.
Precio: 31 €
Aquí les dejo también el Índice del libro :
Préface
Avant-Propos
Introduction
§1. Pourquoi James?
§2. Sur la psychologie fin du 19ème siècle.
§3. La maladie de l’entendement.
§4. Sur les croyances.
§5. La volonté de croire.
§6. Un projet de James.
§7. Religion dans la philosophie.
Chapitre 1 - Eléments d’une biographie
§1. Les racines de la culture américaine.
1.1 Introduction.
1.2 Le puritanisme.
§2. Les transcendantalistes.
§3. Henry James Sr.
§4. William James.
§5. Le Club Métaphysique.
§6. L’esprit de James.
Chapitre 2 - La philosophie de James
§1. Le Pragmatisme.
1.1 Introduction.
1.2 Sur les courants pragmatistes.
§2. La théorie de la vérité.
2.1 Introduction.
2.2 Vérités de constatation.
2.3 Vérités dérivées ou scientifiques.
2.4 Vérités auto-affirmatives.
2.5 La définition classique.
2.6 La théorie de James.
2.7 Quelques critiques.
§3. La métaphysique de Peirce.
§4. La métaphysique de James.
4.1 L’empirisme radical.
4.2 Le pluralisme philosophique.
4.3 Le problème de la liberté de la volonté.
§5. Concepts et percepts.
Chapitre 3 - La psychologie de James §1. Être ou ne pas être: le penseur et la pensée.
1.1 Qui suis-je ?
§2. Théorie jamessienne de la conscience.
2.1 Le courant de la conscience.
2.2 Les états de la conscience.
§3. Le« moi ».
3.1 Le « moi» chez William James.
3.2 Le « moi» chez les mystiques.
§4. La conscience: acte 2.
4.1 La question de l’identité.
§5. Sur les processus inconscients.
5.1 La question de l’inconscient. Inconscient spirituel
5.2 Critique de James des idées psychanalystes.
§6. La théorie James-Lange des émotions.
6.1 On pose le problème.
6.2 Critiques et développements.
6.3 L’aspect cognitif
6.4 Aspect évolutif
6.5 Théorie de Janet.
6.6 Émotions et psychothérapie.
§7. James et les habitudes.
7.1 Introduction.
7.2 Aspect psychothérapique.
7.3 Application à l’éducation.
7.4 Aspect philosophique.
§8. La volonté et le libre arbitre.
8.1 La volonté de croire chez James.
8.2 Sur le libre arbitre.
8.3 Continuité et unité de la conscience.
§9. Actualité des Princip/es.
9.1 Contre la dérive psychanalytique.
9.2 La dérive béhavioriste.
9.3 Les paradoxes de James.
Chapitre 4 - La religion de James
§1. Introduction.
§2. Les expériences psychiques.
2.1 Préliminaires.
2.2 Les études de la médiumnité.
§3. La question de l’immortalité.
§4. Les transformations du système mental.
§5. L’expérience religieuse.
Appendice du Chapitre 4
Chapitre 5 - Commentaires en guise de conclusion
§1. Sur la naissance de la culture américaine au 19ème siècle.
1.1 L’influence étrangère.
1.2 Ni Kant ni Hume.
§2. Sur le pragmatisme.
§3. Sur la vérité.
3.1 Il ne faut pas aller trop vite.
3.2 Vérité et inexactitude.
3.3 Une vérité absolue?
3.4 Les dérives de la pensée.
§4. Questions de Psychologie.
4.1 Généralités.
4.2 Sur la psychothérapie.
4.3 Sur la psychanalyse.
§5. La Religion.
5.1 Sur l’insight.
5.2 La question éthique.
5.3 L’immortalité.
5.4 La religion des mystiques.
5.4.1 Quelle valeur et quelle place assigner à la raison dans la recherche sur la religion?
5.4.2 Qu’est-ce qu’il y a de vrai dans l’expérience religieuse et comment la définir?
5.4.3 Quelle relation existe-t-il entre l’expérience religieuse et les expériences psychiques ou para psychologiques ?
5.4.4 Quelle valeur assigner aux sources et de quel type de sources doit-on tenir compte? 5.5 La religion des mystiques.
5.6 Un mot pour finir.
Bibliographie
20 avr. 2008
Una reseña sobre Aldabonazo en Trocadero
Una reseña de Félix J. Hernández sobre Aldabonazo en Trocadero 162 en Cuba en el Mundo.
Mi querida Ofelia,
Aldabonazo en Trocadero 162 es el primer libro de la colección "Viendo llover en La Habana" que para la editorial Aduana Vieja dirigirá el escritor cubano residente en París, William Navarrete.
El libro fue preparado por la escritora y decoradora cubana establecida en el Reino de Arabia Saudí, Regina Ávila y el propio Navarrete. En él aparecen los textos de 33 autores cubanos que mediante géneros tan diversos como el ensayo, la poesía, el epistolario o el testimonio ofrecen un homenaje al autor cubano más importante del siglo XX.
El su prólogo, titulado "Trocadero 162: una toponimia, un aldabonazo", Navarrete nos dice: "[…] esta compilación de textos comienza con el poema que al pie del ataúd de Lezama, en aquel verano de 1976, comenzara a escribir el dramaturgo José Triana quien escogió con delicadeza el epitafio que marcaría su tumba: "El mar violeta añora el nacimiento de los dioses/ya que nacer es aquí una fiesta innombrable" (del poema Noche insular: jardines invisibles). Porque a partir de su muerte, el espacio fue poblándose de voces que reclamaban su presencia o evocaban su vida de consagración literaria, tal vez no como guía ni ejemplo, sino simplemente como la expresión más elevada de la fidelidad ante la vocación por las letras".
También nos aclara sobre el texto final de la compilación, las razones por las que se escogió al de la bloguera y filóloga cubana residente en La Habana, Yoani Sánchez, para cerrar el libro. En el momento en que sale a la luz Aldabonazo… Sánchez ganaba el Premio "Ortega y Gasset de Periodismo Digital" otorgado por el periódico español El País en razón del esfuerzo de la autora para llevar un blog de pensamiento de libre desde la capital cubana.
Navarrete nos dice en su prólogo: "De la misma manera, para cerrar el ciclo del tiempo de [la] ausencia [de Lezama] resultaba imprescindible un texto – el único – que nos llegara desde La Habana, o sea, desde ese marco físico, única y última morada del poeta. Sin la certeza de qué pudiera quedar en el lugar de los hechos y de cómo encararía la imagen de Lezama un escritor nacido prácticamente en el momento de su muerte, faltaría a este libro ese alguien que "tenía que guardar las bóvedas del cementerio", como muy bien apunta su autora, Yoani Sánchez, en el epílogo de este libro".
Los restantes autores, todos cubanos, establecidos fuera de la Isla, son: Iván González Cruz y José Prats Sariol (ambos de referencia obligada por los muchos libros que han publicado sobre la vida y obra del maestro de Trocadero), el poeta Manuel Díaz Martínez establecido en Canarias; el crítico de arte Carlos M. Luis, amigo de Lezama y colaborador de Orígenes; Regina Maestri, viuda del economista cubano Raúl Maestri y autora de las Obras Escogidas del mismo; el arquitecto Nicolás Quintana, la escritora cubana exiliada en París Nivaria Tejera, autora de una de las novelas cubanas más importantes del siglo XX: El barranco; el poeta y periodista Raúl Rivero, exiliado en Madrid y prisionero de la Primavera Negra del 2003; Miguel Sales, ex prisionero político cubano; el poeta Manuel Vázquez Portal, exiliado en Miami y prisionero de la Primavera Negra del 2003; la dramaturga y mención del premio "Juan Rulfo de RFI" Lira Campoamor, establecida en Bruselas; el hispanista Jorge Casteleiro,residente en Washington donde trabaja para el Departamento de Estado norteamericano; los poetas Juan Cueto-Roig, Néstor Díaz de Villegas, Reinaldo García Ramos, Germán Guerra, Félix Lizárraga y Carlos Pintado,todos establecidos en Estados Unidos; el poeta y editor de la revista "Arique" Raúl Tápanes, establecido en Chile; el editor y poeta Pío Serrano, director de la editorial madrileña Verbum; los poetas cubanos exiliados en Madrid David Lago y Alberto Lauro (Premio "Odisea" de novela), el investigador y catedrático de la Universidad de Kentucky Enrico Mario Santí; el bloguero e historiador Ernesto H. Busto, establecido en Barcelona; el filósofo Emilio Ichikawa; el historiador Enrique del Risco, desde Nueva York; la novelista Teresa Dovalpage, finalista del premio "Herralde" de novela, establecida en Alburquerque; los novelistas José Manuel Prieto (en Nueva York) y Félix Luis Viera (en México); además de los propios editores, los escritores Regina Ávila y William Navarrete, ambos desde París en donde acaban de lanzar otro libro en común La Canopea del Louvre, sobre 12 obras magistrales de este célebre Museo. El libro incluye en portada la obra de la joven artista cubano-saudí Latifa Al-Sowayel y en el interior un dibujo de Lezama Lima realizado por Mariano Rodríguez.
Concluye Navarrete en su prólogo evocando el simbólico nombre de la dirección en donde vivió gran parte de su vida el autor de Paradiso: "Trocadero evoca una lejana batalla en 1823, una explanada conmemorativa con hermoso panorama hacia el Campo de Marte de París, incluso una calle de Sevilla, otra en la soleada Torremolinos y un parque natural en la bahía de Cádiz a proximidad del sitio en que ocurrió el combate entre franceses y liberales españoles. Trocadero 162 (bajos) es el centro de la órbita de un "etrusco en La Habana Vieja": una seña inequívoca que marca como el estampido seco de un matasellos o el aldabonazo en la puerta o el crujir de las cadenas de un puente levadizo sobre un foso poblado de leyendas. Penetrar la órbita del poeta por el sitio de todos los encantamientos es hacer que regrese a la lámpara frotada el genio oriental de nuestros deseos. No podría llamarse de otro modo este libro si debemos tocar a la puerta del poeta y apartar, ya sentados en su salón, las volutas de habano para verle el rostro. De esa conversación muy íntima y muy cubana nacen todos nuestros textos. Ahora dejamos al lector la puerta entreabierta para que talle en la madera su propia hendija, para que oiga y vea por sí mismo cómo puede manar en plenitud "la noche insular" desde la toponimia minúscula, ahora en creces, de un barrio de La Habana."
Ambos editores anuncian que los próximos libros de la colección ahondarán en la vida y obra de otros dos grandes poetas cubanos: Dulce María Loynaz (Premio Cervantes) y Gastón Baquero, fallecido en exilio en Madrid.
Como suelo hacerlo, te lo haré llegar más temprano que tarde a San Cristóbal de La Habana. Con gran cariño desde estas lejanas tierras allende los mares,
Félix José
Aldabonazo en Trocadero 162.
William Navarrete y Regina Ávila (Eds.)
Primera edición: Editorial Aduana Vieja, marzo de 2008.
Portada: "Viendo llover en La Habana"
de Latifa Al-Sowayel.
ISBN:978-84-96846-10-04
Mi querida Ofelia,
Aldabonazo en Trocadero 162 es el primer libro de la colección "Viendo llover en La Habana" que para la editorial Aduana Vieja dirigirá el escritor cubano residente en París, William Navarrete.
El libro fue preparado por la escritora y decoradora cubana establecida en el Reino de Arabia Saudí, Regina Ávila y el propio Navarrete. En él aparecen los textos de 33 autores cubanos que mediante géneros tan diversos como el ensayo, la poesía, el epistolario o el testimonio ofrecen un homenaje al autor cubano más importante del siglo XX.
El su prólogo, titulado "Trocadero 162: una toponimia, un aldabonazo", Navarrete nos dice: "[…] esta compilación de textos comienza con el poema que al pie del ataúd de Lezama, en aquel verano de 1976, comenzara a escribir el dramaturgo José Triana quien escogió con delicadeza el epitafio que marcaría su tumba: "El mar violeta añora el nacimiento de los dioses/ya que nacer es aquí una fiesta innombrable" (del poema Noche insular: jardines invisibles). Porque a partir de su muerte, el espacio fue poblándose de voces que reclamaban su presencia o evocaban su vida de consagración literaria, tal vez no como guía ni ejemplo, sino simplemente como la expresión más elevada de la fidelidad ante la vocación por las letras".
También nos aclara sobre el texto final de la compilación, las razones por las que se escogió al de la bloguera y filóloga cubana residente en La Habana, Yoani Sánchez, para cerrar el libro. En el momento en que sale a la luz Aldabonazo… Sánchez ganaba el Premio "Ortega y Gasset de Periodismo Digital" otorgado por el periódico español El País en razón del esfuerzo de la autora para llevar un blog de pensamiento de libre desde la capital cubana.
Navarrete nos dice en su prólogo: "De la misma manera, para cerrar el ciclo del tiempo de [la] ausencia [de Lezama] resultaba imprescindible un texto – el único – que nos llegara desde La Habana, o sea, desde ese marco físico, única y última morada del poeta. Sin la certeza de qué pudiera quedar en el lugar de los hechos y de cómo encararía la imagen de Lezama un escritor nacido prácticamente en el momento de su muerte, faltaría a este libro ese alguien que "tenía que guardar las bóvedas del cementerio", como muy bien apunta su autora, Yoani Sánchez, en el epílogo de este libro".
Los restantes autores, todos cubanos, establecidos fuera de la Isla, son: Iván González Cruz y José Prats Sariol (ambos de referencia obligada por los muchos libros que han publicado sobre la vida y obra del maestro de Trocadero), el poeta Manuel Díaz Martínez establecido en Canarias; el crítico de arte Carlos M. Luis, amigo de Lezama y colaborador de Orígenes; Regina Maestri, viuda del economista cubano Raúl Maestri y autora de las Obras Escogidas del mismo; el arquitecto Nicolás Quintana, la escritora cubana exiliada en París Nivaria Tejera, autora de una de las novelas cubanas más importantes del siglo XX: El barranco; el poeta y periodista Raúl Rivero, exiliado en Madrid y prisionero de la Primavera Negra del 2003; Miguel Sales, ex prisionero político cubano; el poeta Manuel Vázquez Portal, exiliado en Miami y prisionero de la Primavera Negra del 2003; la dramaturga y mención del premio "Juan Rulfo de RFI" Lira Campoamor, establecida en Bruselas; el hispanista Jorge Casteleiro,residente en Washington donde trabaja para el Departamento de Estado norteamericano; los poetas Juan Cueto-Roig, Néstor Díaz de Villegas, Reinaldo García Ramos, Germán Guerra, Félix Lizárraga y Carlos Pintado,todos establecidos en Estados Unidos; el poeta y editor de la revista "Arique" Raúl Tápanes, establecido en Chile; el editor y poeta Pío Serrano, director de la editorial madrileña Verbum; los poetas cubanos exiliados en Madrid David Lago y Alberto Lauro (Premio "Odisea" de novela), el investigador y catedrático de la Universidad de Kentucky Enrico Mario Santí; el bloguero e historiador Ernesto H. Busto, establecido en Barcelona; el filósofo Emilio Ichikawa; el historiador Enrique del Risco, desde Nueva York; la novelista Teresa Dovalpage, finalista del premio "Herralde" de novela, establecida en Alburquerque; los novelistas José Manuel Prieto (en Nueva York) y Félix Luis Viera (en México); además de los propios editores, los escritores Regina Ávila y William Navarrete, ambos desde París en donde acaban de lanzar otro libro en común La Canopea del Louvre, sobre 12 obras magistrales de este célebre Museo. El libro incluye en portada la obra de la joven artista cubano-saudí Latifa Al-Sowayel y en el interior un dibujo de Lezama Lima realizado por Mariano Rodríguez.
Concluye Navarrete en su prólogo evocando el simbólico nombre de la dirección en donde vivió gran parte de su vida el autor de Paradiso: "Trocadero evoca una lejana batalla en 1823, una explanada conmemorativa con hermoso panorama hacia el Campo de Marte de París, incluso una calle de Sevilla, otra en la soleada Torremolinos y un parque natural en la bahía de Cádiz a proximidad del sitio en que ocurrió el combate entre franceses y liberales españoles. Trocadero 162 (bajos) es el centro de la órbita de un "etrusco en La Habana Vieja": una seña inequívoca que marca como el estampido seco de un matasellos o el aldabonazo en la puerta o el crujir de las cadenas de un puente levadizo sobre un foso poblado de leyendas. Penetrar la órbita del poeta por el sitio de todos los encantamientos es hacer que regrese a la lámpara frotada el genio oriental de nuestros deseos. No podría llamarse de otro modo este libro si debemos tocar a la puerta del poeta y apartar, ya sentados en su salón, las volutas de habano para verle el rostro. De esa conversación muy íntima y muy cubana nacen todos nuestros textos. Ahora dejamos al lector la puerta entreabierta para que talle en la madera su propia hendija, para que oiga y vea por sí mismo cómo puede manar en plenitud "la noche insular" desde la toponimia minúscula, ahora en creces, de un barrio de La Habana."
Ambos editores anuncian que los próximos libros de la colección ahondarán en la vida y obra de otros dos grandes poetas cubanos: Dulce María Loynaz (Premio Cervantes) y Gastón Baquero, fallecido en exilio en Madrid.
Como suelo hacerlo, te lo haré llegar más temprano que tarde a San Cristóbal de La Habana. Con gran cariño desde estas lejanas tierras allende los mares,
Félix José
Aldabonazo en Trocadero 162.
William Navarrete y Regina Ávila (Eds.)
Primera edición: Editorial Aduana Vieja, marzo de 2008.
Portada: "Viendo llover en La Habana"
de Latifa Al-Sowayel.
ISBN:978-84-96846-10-04
16 avr. 2008
A los 33 de Aldabonazo en Trocadero 162
Acabo de recibir Aldobonazo en Trocadero 162. El primer libro de la Colección "Viendo llover en La Habana" que tengo el gusto de dirigir para Aduana Vieja. Les adelanto que el libro quedó "comme il faut". Los 33 autores del mismo por orden de aparición en el libro :
1- José Triana
2- Regina AVILA
3- Lira CAMPOAMOR
4- Jorge CASTELEIRO
5- Juan CUETO - ROIG
6- Manuel DÍAZ MARTÍNEZ
7- Néstor DÍAZ de VILLEGAS
8- Teresa DOVALPAGE
9- Reinaldo GARCÍA RAMOS
10- Iván GONZÁLEZ CRUZ
11- Germán GUERRA
12- Ernesto HERNÁNDEZ BUSTO
13- Emilio ICHIKAWA
14- David LAGO
15- Alberto LAURO
16- Félix LIZÁRRAGA
17- Carlos M. LUIS
18- Regina MAESTRI
19- William NAVARRETE
20- Carlos PINTADO
21- José PRATS SARIOL
22- José Manuel PRIETO
23- Nicolás QUINTANA
24- Enrique del RISCO
25- Raúl RIVERO
26- Miguel SALES
27- Yoani SÁNCHEZ
28- Enrico Mario SANTÍ
29- Pío SERRANO
30- Raúl TÁPANES
31- Nivaria TEJERA
32- Félix Luis VIERA / ensayo
33- Manuel VÁZQUEZ PORTAL
Cada autor con un texto personal, libre y admirable. Comienzo a enviar los libros hoy a cada uno. Aldabonazo… comienza con un largo poema de José Triana, escrito al pie del ataúd de Lezama durante su funeral (1976) y lo cierra el texto de Yoani Sánchez, quien, de los 33 autores es la única que vive en la Isla. Como bien nos dice "alguien debe cuidar las tumbas de los abuelos". Cuando, en diciembre 2007, le pedí el texto para el libro Yoani me dijo que ella se consideraba ya más bloguera que filóloga. Cuando recibí el texto le respondí que ya nadie sabía muy bien lo que era ser filólogo pero que su texto era un aldabonazo de los más sonoros y buenos; y una bendición tener a alguien que escribiera como ella, desde Cuba. Les adelanto el texto de Yoani:
DE MITOS, MITÓMANOS Y OTRAS FABULACIONES
por YOANI SÁNCHEZ
en : Aldabonazo en Trocadero 162
Ed. Aduana Vieja, Valencia, 2008 / Colección "Viendo llover en La Habana" / pp. 176 - 179.
Hemos terminado por volvernos todos un poco lezamianos. Incluso aquellos para los que la lectura de Paradiso no fue un deleite infinito sino más bien un largo sacrificio – pospuesto en varias ocasiones – han claudicado ante el inquilino de Trocadero 162. No fuimos conquistados por sus frases barrocas, sus rebuscadas citas o su erudición, sino por aquellas parcelas de imágenes en las que, apoyándose en la identidad, el mito y nuestra propia candidez, nos dejó encerrados para siempre.
Esta isla, necesitada de invenciones que apoyen su dudosa genealogía, su breve pasado y – una buena parte de las veces – sus impresentables protagonistas, ha hecho de la metáfora una realidad. Más que mito, mitomanía nacional compartida y ensalzada. Los hacedores de la leyenda nacional, se han encontrado con la difícil tarea de reconstruir la estirpe entrecortada de este trozo de tierra. De ahí que hayan optado por la invención, la fantasía y el embuste. No siempre lo han hecho con la intención de hacérnoslo creer – como sí es el caso de los políticos – sino como parte de un juego consciente de reinvención y parodia de los grandes mitos universales.
La lectura de los textos lezamianos nos devela que toda evocación es una forma de distorsionar el pasado. La metáfora, obtenida de esa desfiguración, sustenta a su vez los nuevos textos poéticos. Cuando la base de la invención es además fantasiosa y ficticia, toda la armazón posterior tiene el inconfundible tufo de lo apócrifo. Ya lo sabía el Maestro, pródigo en referencias inventadas que fueron un dolor de cabeza para los que quisieron probar si eran auténticas. La cosmogonía confeccionada por él en Paradiso, llegaría a convertírsenos en un remoto pasado de tradiciones y ritos, en una fábula irreal y lejana.
Ante la opulenta mesa de doña Augusta nuestra memoria culinaria no puede ubicar ya los sabores, reconocer las texturas y evocar lo probado. La propia familia de José Cemí, entremezclada de nacionalidades y dueña de un central, nos suena tremendamente irreal en los tiempos que corren. De manera que el mito se hizo fantasía, las alusiones se volvieron ficción y el largo camino de iniciación poética del protagonista, se nos convirtió en un recorrido por lo perdido y lo añorado.
Los años aumentaron el grado de irrealidad que encontrábamos en Paradiso a fuerza de perderse las referencias y de girar ciento ochenta grados el escenario de sus personajes. Hasta la forma de presentársenos la historia-mito nacional varió. Sin embargo, la metamorfosis principal ocurrió dentro de nosotros, los ingenuos oyentes del brujo autor de leyendas, nos resistimos entonces a aceptar sus fabulaciones.
Si con el sillón, el tabaco y el asma lezamianos, las invenciones lograban su efecto hipnótico, llegó el momento en que exigimos más. No fueron suficientes los ademanes del contador de cuentos, las citas griegas, las referencias orientales o las volutas de humo para aletargarnos. Necesitamos el guiño inesperado que dijera “nada de esto es verdad, lo acabo de inventar”. Sólo la mezcla del mito y la ironía, la creencia y el cinismo, nos defendió de la dolorosa fantasía llamada Cuba.
El mito sucumbió así ante las certidumbres de la burocracia, la polvorienta cotidianeidad y nuestra renuncia a levantar vuelo. La fabulación rindió armas frente a las consignas políticas, que apelaron también – aunque de una manera más aburrida que en los cuentos – al “lobo de dientes filosos” y al beso del príncipe que nos había despertado. Pero todo proceso tiene su “curso délfico”, su consabida serpiente que se muerde la cola, y al final hemos terminado por regresar a la invención. De hace un tiempo para acá, nos hemos vuelto tremendamente lezamianos.
Después de años aligerando la mitología nacional para poder transportarla más fácilmente a los nuevos lugares que nos señalaban el exilio y el ostracismo, nos ha dado ahora por los detalles, por el barroquismo y la exuberancia. No obstante, ya no está tan claro el pasado, no hay una línea definida que explique nuestra ralea, sino un mito fragmentado y plural que jamás podrá titularse “Paradiso”.
El fatalismo del Maestro también ha regresado. ¿Qué tal si la Ananké llegó para no irse? Si decidió – contrario a la dirección de la actual migración – radicarse aquí, procrear entre estas palmas y nacionalizarse en esta Isla.
Ahora sí que somos lezamianos. Nos mecemos en el sillón, solos, con la respiración jadeante, la casa cayéndosenos a pedazos, la metáfora como refugio y el forzado peregrinar inmóvil. Velamos desde aquí porque “alguien tenía que guardar las bóvedas del cementerio, donde están nuestros padres y nuestros abuelos” y alimentar el fuego del próximo mito, de la nueva ilusión que nos hará reinventar la Isla.
Les pondré el poema de José Triana en próximo post.
El Bandido Doblemente Armado / Vallejo / Madrid
"La pomada mágica para el dolor es César Vallejo", dijo Félix Grande anoche en El Bandido…
De izq. a derecha: Leo Zelada, Alberto Lauro, Félix Grande, Enrique Gracia Trinidad, William Navarrete / en El Bandido Doblemente Armado
En El Bandido doblemente armado, la librería de Diego Pita y una de mis preferidas en Madrid, noche de poesía con Vallejo a cuestas en este año de celebraciones en torno al poeta de Lima y París. La tertulia la organiza el joven poeta limeño Leo Zelada, las lecturas a cargo del poeta y flamencólogo meridano Félix Grande (autor del célebre poemario Las rubáiyatas de Horacio Martín que le valiera el "Premio Nacional de Literatura" en España y del escritor y también poeta Enrique Gracia Trinidad. La lectura más honda y hermosa de Vallejo que he oído. Sin Alberto Lauro en Madrid hubiera tenido que conformarme con la tumba de Montparnasse sobre la que algún que otro turista (o poeta) lanza, de vez en cuando, versos propios o ajenos.
☛El Bandido Doblemente Armado
Calle Apodaca, n° 3
Madrid.
De izq. a derecha: Leo Zelada, Alberto Lauro, Félix Grande, Enrique Gracia Trinidad, William Navarrete / en El Bandido Doblemente Armado
En El Bandido doblemente armado, la librería de Diego Pita y una de mis preferidas en Madrid, noche de poesía con Vallejo a cuestas en este año de celebraciones en torno al poeta de Lima y París. La tertulia la organiza el joven poeta limeño Leo Zelada, las lecturas a cargo del poeta y flamencólogo meridano Félix Grande (autor del célebre poemario Las rubáiyatas de Horacio Martín que le valiera el "Premio Nacional de Literatura" en España y del escritor y también poeta Enrique Gracia Trinidad. La lectura más honda y hermosa de Vallejo que he oído. Sin Alberto Lauro en Madrid hubiera tenido que conformarme con la tumba de Montparnasse sobre la que algún que otro turista (o poeta) lanza, de vez en cuando, versos propios o ajenos.
☛El Bandido Doblemente Armado
Calle Apodaca, n° 3
Madrid.
14 avr. 2008
Tempo Club : The best jam session in Madrid
La mejor descarga de latin jazz de Madrid. Si viviera aquí fuera pi constante en esta jam session del Tempo Club. Todos los domingos, a partir de las 10 h 30, "Caramelo" (piano), Arnaldo Lescay (batería), Alex Acanda (bajo) y Yusmier (congas) empiezan suavecito. Los cuatro son cubanos. A medida que avanza la noche van apareciendo otros músicos, se añaden bongoses, trompetas, otros bateristas... La descarga se vuelve puro delirio. Los músicos gozan tocando, improvisando. Se nota la complicidad, el diálago abierto y cómo van subiéndose la parada unos a otros, haya mucho o poco público. Ellos tienen una pila de cosas que contarse, esté quien esté en la sala. Los instrumentos se disparan. Puro fuego. Pura fiebre. Delirio del bueno. Gracias Chago porque hacía años que no me echaba una jam session cubana de verdad. A ver cómo "te subo la parada" cuando vengas a París. Lo veo difícil, a menos que me lleve a estos dioses prestados para allá.
En: Tempo Club
calle Duque de Osuna, 8 (subiendo las escaleras de la calle Princesa)
Metro PLaza de España
Arnaldo Lescay / batería
Yusmier / percusión
Alex Acanda / bajo
Javier Massó "Caramelo" / piano
En: Tempo Club
calle Duque de Osuna, 8 (subiendo las escaleras de la calle Princesa)
Metro PLaza de España
Arnaldo Lescay / batería
Yusmier / percusión
Alex Acanda / bajo
Javier Massó "Caramelo" / piano
13 avr. 2008
Hoy en El Herald
Hoy escribo en El Nuevo Herald sobre la exposición en el Museo del Hombre de París, del navegante y artista francés Titouan Lamazou. Pinchar aquí.
Titouan Lamazou / El Nuevo Herald
Titouan Lamazou / El Nuevo Herald
11 avr. 2008
Waldo Balart / Madrid
Waldo (Díaz)-Balart junto a su última obra ayer en su atelier colindante con Atocha. Recorrimos juntos la galería que Encuentro en la Red ha colgado sobre su trabajo. Me pareció cuidada y muy interesante. Waldo se prepara para su exposición en Alemania. Hablamos siempre de pintura primero, y luego de la vida. El humor desbordante de Waldo es lo más distante que hay de su pintura.
A dos décadas del derrumbe... / Madrid
Dentro de poco se cumplen 20 años del derrumbe del muro de Berlín. En Madrid este parque que lleva el nombre de la capital alemana exhibe fragmentos de la antigua muralla de la Guerra Fría. Cada vez que vengo por aquí atravieso los parterres del parque y me pregunto invariablemente lo mismo: ¿y del derrumbe del nuestro qué? La ausencia de respuesta, o de posible respuesta, no me deja disfrutar de la excelente selección botánica del sitio.
10 avr. 2008
En la Fundación Hispano Cubana
De izquierda a derecha: Isanela Contreras, Magaly González, Chago, William Navarrete, Grace Piney Roche e Irma Alfonso Rubio.
Ayer en la Fundación Hispano Cubana (Madrid), la presentación de nuestro libro y lamentando la ausencia de Regina Avila, autora de seis de las historias del mismo. Agradecimientos a Javier Martínez Corbalán (director de la FHC), a Orlando Fondevila y Begoña Martínez, y mi querida amiga Grace Piney Roche, "maestra de ceremonias" de la presentación. Gracias a "Chago" por sus palabras y lo que de "La Canopea..." dijo. Cuando me lo mande lo cuelgo por aquí y por allá.
Ayer en la Fundación Hispano Cubana (Madrid), la presentación de nuestro libro y lamentando la ausencia de Regina Avila, autora de seis de las historias del mismo. Agradecimientos a Javier Martínez Corbalán (director de la FHC), a Orlando Fondevila y Begoña Martínez, y mi querida amiga Grace Piney Roche, "maestra de ceremonias" de la presentación. Gracias a "Chago" por sus palabras y lo que de "La Canopea..." dijo. Cuando me lo mande lo cuelgo por aquí y por allá.
9 avr. 2008
El Oriente de Severo Sarduy en Madrid
Anoche, inauguración de la Exposición El Oriente de Severo Sarduy en el Instituto Cervantes de Madrid (calle Alcalá, nº 40), organizada por Gustavo Guerrero. Hermosas imágenes de Severo en el mundo oriental, desde Marruecos, Túnez y Turquía hasta Indonesia, China e India. Del insaciable viajero por el mundo árabe aparecen en la muestra tarjetas postales, textos, recuerdos, enviados por Severo a amigos. También textos sobre la cultura china en Cuba, publicaciones, cartas, memorabilia,... Para la inauguración una bailarina china interpretó una danza, probablemente en relación con la obra de Severo. Existe un enjundioso catálogo de la expo. Me dio gran placer ver a viejos amigos y cenar con ellos.
Exposición Severo Sarduy en el Instituto Cervantes de Madrid
De izquierda a derecha: Antonio José Ponte, Ramón Alejandro, Roberto González Echevarría y William Navarrete.
François Walh, mentor y compañero de Severo durante su vida en París.
Gustavo Guerrero (Gallimard) y Carmen Vázquez.
Exposición Severo Sarduy en el Instituto Cervantes de Madrid
De izquierda a derecha: Antonio José Ponte, Ramón Alejandro, Roberto González Echevarría y William Navarrete.
François Walh, mentor y compañero de Severo durante su vida en París.
Gustavo Guerrero (Gallimard) y Carmen Vázquez.
7 avr. 2008
Me voy pa' la Villa del Oso y el Madroño
Presentan en Madrid La canopea del Louvre de William Navarrete y Régina Ávila
En: Cuba Nuestra
París, 6 de abril de 2008.
Mi querida Ofelia,
Entre las miles de obras que exhibe el célebre Museo del Louvre, en la capital francesa, los autores William Navarrete y Regina Avila, han escogido para su libro aquéllas que prefieren (seis cuadros cada uno) y han tejido una historia en torno a cada lienzo. A la vez que ofrecen, sobre bases documentadas, una visión particular de las mismas, hacen que artistas, personajes y temas, cobren nueva vida ante los espectadores de nuestro tiempo. Se trata, pues, de un recorrido excepcional, sin más entresijos que los de la sensibilidad personal, y de un libro que se sitúa en la frontera de la ficción literaria y la crítica de arte.
A La Canopea del Louvre la precede un prólogo del pintor Ramón Alejandro, establecido en París, y dedicado a su vez a otro pintor cubano de la Ciudad Luz, Roberto García York, ya fallecido. Lo ha titulado, refiriéndose a la visión de los autores y la mitificación-desmitificación de la alta cultura Europea por parte de los mismos: "Dos criollos ante la esfinge".
Por otra parte, en la "Nota Introductoria" del libro, Ávila y Navarrete explican por qué siendo la canopea la capa superior de los árboles en las zonas de bosques tupidos, han deseado simbolizar, mediante la imagen que este título brinda, el hecho de que las seis obras que cada uno seleccionó significarían lo que un individuo escogería si tuviera que salvar "una cantidad exactas de prendas de las brasas de un incendio o del hundimiento de un barco".
De esta selección Regina Ávila escoge obras de Antonello de Messina, Pier Francesco Mola, Tiepolo, Caravaggio, Vermeer y el Veronese; mientras que William Navarrete optó por contar sus historias a partir de lienzos de David, Delacroix, Géricault, el Bronzino, Georges La Tour y Quentin Metsys. En total doce cuadros del Louvre y doce historias relacionadas directa e indirectamente a la vez con la interpretación oficial que la Historia del Arte ha ofrecido de las mismas a lo largo del ejercicio de la investigación crítica.
A continuación te envío la invitación que me hizo llegar la Fundación Hispano Cubana, para la presentación del libro en la capital de nuestra querida Madre Patria:
Estimado amigo:
La Fundación Hispano Cubana y la Editorial Aduana Vieja tiene el gusto de invitarle al siguiente acto Presentación del libro "La Canopea del Louvre" (Aduana Vieja, Valencia, 2008 / edición español - francés) de William Navarrete y Régina Ávila.
Presentan: D. Grace Piney Roche (Fundación Hipano-Americana), D. Ramón Alejandro (autor del prólogo), D. Santiago Méndez Alpízar "Chago" y William Navarrete.
Miércoles 9 de abril
19:00 horas
en la sede de la Fundación Hispano Cubana (C/ Orfila, 8 - 1º A - MADRID).
Un gran abrazo desde la Ciudad Luz,
Félix José Hernández.
6 avr. 2008
Félix J. Hernández: ilustre hijo de Camajuaní en París
Les presento a Félix José Hernández, otro cubano de larga vida en París, profesor de la Universidad de Marne-la-Vallée y amigo de años en estas latitudes. Félix es conocido por sus crónicas excelentes que escribe siempre como carta a su madre y comienzan invariablemente por "Querida Ofelia…". Lo conocí hace hoy exactamente 14 años (e1 6 de abril de 1994), en casa de Tania Galindo, en la tanda allí organizada de la entonces recién estrenada película Fresa y Chocolate que mi amigo Jorge Moré había traído fresquita en vídeo desde Cuba.
Hoy tuve larga conversación dominical con Félix quien es, además, un gran viajero. Junto a su esposa Martha han recorrido medio mundo y han llevado bien lejos el nombre de Camajuaní. Cada vez que me invento un viaje me gusta mirar en los archivos de Félix a ver si ya no reportó antes (lo cual es siempre probable) cuando anduvo por allí.
El caso es que Félix va recogiendo en internet, en diferentes tomos, sus crónicas de diversos temas: viajes, pensamiento, recuerdos de Cuba, vida cubana en París, disidencia, exilio y un largo y variado etcétera.
Le agradezco (no ahora, sino desde siempre y él lo sabe) cada vez que ha reseñado alguna actividad que haya organizado, algún libro publicado y su presencia en tantas ocasiones.
En el Tomo 1 / Capítulo 1 Félix da fe de la ocasión en que organicé la presentación del documental Tributo a papá en París. En ese mismo tomo, capítulo 2 de mis poemas árabes de los que habla bajo el título de "Cantando poemas en Marraquech". En el Capítulo cuatro de mi libro y conferencia Cuba: la música confiscada. En el Capítulo 7 de la publicación en la revista italiana Orizzonti de poetas cubanos en prisión. En ese mismo tomo y capítulo de mi poemario Edad de miedo al frío. En el Tomo 2, capítulo 2 de mi antología Insulas al pairo. En ese mismo tono y capítulo 2 también de una presentación que hice de autores cubanos en París. En el Tomo 3, capítulo 3 del libro Visión crítica de Gina Pellón. En el Capítulo 3 un reportaje de uno de los 70 y pico "Martes por la Democracia en Cuba" en los que participé, en la esquina de la Embajada de Cuba en París (esta vez junto a Sylvia Iriondo). Y así sucesivamente, hay decenas de crónicas más en que Félix ha reportado para los diarios electrónicos donde escribe sobre la vida de cubanos en París. En lo que me concierne mi agradecimiento ha sido siempre grande.
Aquí les dejo el enlace para las deliciosas crónicas de Crónicas de Félix J. Hernández: Querida Ofelia…
4 avr. 2008
¿Dónde está el piloto?
Seguramente se acuerdan de aquella película cómica (creo que tuvo dos partes) titulada ¿Dónde está el piloto?. Pues bien, parece que al fin vamos a tener también nuestra película sobre un piloto que se esfumó. Pero lo que más me alegra es que la amiga Ana Margarita Martínez llegará al final de esta larga historia sobre la que se ha especulado más de la cuenta. La noticia la da Erwin Pérez en el Herald de hoy. Y como Ana Margarita siempre va de sonrisa en sonrisa ahí les pongo una foto en que aparecemos junto al Dr. Gil Fdez-Yera, el día de la inauguración del Festival Internacional de Ballet de Miami 2007. Lo que me pregunto y (le pregunto) es quién hará el papel del deleznable piloto.
Al vuelo: de película
ERWIN PEREZ
El Nuevo Herald
Ana Margarita al cine. La famosa ex esposa del espía Juan Pablo Roque quiere mantener la novedad en secreto pero no puede con el entusiasmo. Contesta con monosílabos, pero ya se da por hecho que se filmará una película de su cinematográfica vida. "No se puede decir nada todavía'', contesta con su expresiva sonrisa sobre la noticia. Entretanto, mientras su proyecto de la pantalla grande toma forma final, Ana se dedica a las Relaciones Públicas. Aquí, por ejemplo, aparece en una reunión especial celebrada hace poco, junto a su amiga, Lisette Elguezábal y Gloria Estefan.*
Foto: de izq. a derecha William Navarrete, Ana Margarira Martínez y Gil Fdez-Yera, tomada por ???
3 avr. 2008
La Señora
El libro me lo prestó mi amigo Darío Méndez y se trata de una biografía casi novelada escrita por el estudioso inglés y especialista en cuestiones judías de la Universidad de Oxford Cecil Roth (1899-1970) sobre ese personaje del Renacimiento, absolutamente fascinante, que fue Gracia Nasi, la primera mujer banquera de Europa. Bautizada como Beatriz de Luna cuando nació en Portugal en un hogar de judíos conversos, pasó a llamarse Beatriz Mendes tras su casamiento con el acaudalado Francisco Mendes, otro judío converso de Portugal al parecer salido de España. Al enviudar y ser decretada la expulsión de los judíos de Portugal, Beatriz, ya convertida en la banquera y prestamista de las grandes cortes europeas, dirige el Banco Mendes, rival en Europa de la institución bancaria de los Médicis. Cecil Roth sigue los pasos de esta mujer sin par en Lyon, Londres, Amberes (en donde es personaje clave de la corte de Carlos V), Venecia, Ferrara (donde es huésped ilustre de la familia de los Este), Salónica, etc. Cansada de tener que levantar el campamento cada vez que se decretaba una expulsión de judíos de cualquier Ciudad-Estado europea, Beatriz se muda a Constantinopla, en donde es recibida con todos los honores, por Solimán el Magnífico, quien manda a construir un palacete para que se sienta cómoda. Indignada contra el Papa por las bulas antisemitas, Beatriz Mendes – ahora, desde Constantinopla bajo su nombre judío de Gracia Nasi – decreta y organiza el primer bloqueo de la historia contra un Estado, en este caso contra el puerto de Ancona y los Estados Pontificales…
No voy a contarles el final de su historia porque si no ya no tiene gracia leer el libro o indagar sobre ella. Sólo les adelanto que se adelantó a la implantación de colonias judías en Tierra Santa. En todo caso semejante mujer es sólo comparable, en su siglo, con Elizabeth I de Inglaterra, María Estuardo, Catalina de Médicis, Isabel de Este o Lucrecia Borgia. Sin embargo, hasta que Cecil Roth no desempolvó su historia se le conocía menos que a su propio sobrino, Juan Miquez, Duque de Naxos.
Advierto que la portada del libro es un cuadro del Bronzino correspondiente a una dama de la época (1540), pues hasta donde se sabe, de Gracia no hubo nunca retratos. Y que entre los hebreos se le llamaba "La Señora" (Ha-Geveret) por lo mucho que había ayudado a su pueblo por donde quiera que pasaba.
1 avr. 2008
Rabat-M'dina y San Pablo el Náufrago
Catacumbas de San Pablo
M'dina
De todos los santos San Pablo es el que debería ser proclamado "Santo Patrón del Turismo". Cuando uno lee su vida se pregunta cómo pudo dar tantos viajes de ida y vuelta entre Macedonia, Atenas, Corinto y otras ciudades e islas griegas; Cilicia, Frigia, Licia y otras provincias de Asia Menor y todo el territorio de Siria, Fenicia y Palestina, en donde no se perdía una celebración cristiana ni paraba de predicar el Evangelio. Sin contar el viaje a España, del que todavía existen dudas. Antes de su encarcelamiento en el año 58 dC (San) Pablo se hallaba en Corinto (Peloponeso) y de pronto decide regresar a Jerusalén para celebrar la Pentecostés con los suyos. Mucho me gustaría que el apóstol me pasara el "tuyau" de su tour operador porque a mí a veces las fechas y las disponibilidades en hoteles y aviones no se me dan tan fácil.
El caso es que después de que San Pablo regresara por tercera vez a Jerusalén, los judíos logran sacarlo de circulación metiéndolo en la prisión de Cesarea. Pero como Pablo era ciudadano romano no podía ser ni azotado ni juzgado por un tribunal judío, así que pudo apelar al César y salir, al cabo de dos años, de la prisión y hacerse conducir a Roma para que allá lo juzgaran.
Y es ahí donde el azar, recurrente en la vida de muchos santos, hace que el futuro San Pablo llegue a la isla de Malta, en donde naufraga la embarcación que lo conducía al Lazio. En Malta ocurrirá el episodio de la mordedura de la víbora. (San) Pablo, auxiliado por (San) Lucas y otros evangelizadores que iban en la comisión de embullo para Roma, aprovechan esta imprevista escala para curar a algunos enfermos y convertir de paso a parte de la población de la isla, incluido el gobernador romano de entonces que se llamaba Publius.
Ahora bien, en la ciudad maltesa de Rabat-M'dina (nombre heredado de la ocupación árabe de la isla entre 870 y 1090), se encuentra la célebre gruta en donde supuestamente se escondió (San) Pablo. Allí rezó y también lo hizo siglos después su tocayo Juan Pablo II. Pero lo curioso no es la gruta de San Pablo que, fuera del carácter místico, no tiene gran interés; sino las célebres Catacumbas llamadas de San Pablo que están a unos pasos de la gruta. Aunque no existían en el momento en que (San) Pablo se encuentra en Malta supongo que se les ha llamado así por ser el apóstol el que introdujo la moda de este tipo de enterramiento propio de los cristianos viejos. También en la ciudad de La Valetta, la Iglesia de San Pablo el Náufrago exhibe dos reliquias relacionadas con la vida del santo. Una de ellas es un fragmento de la columna romana en la que fue atado antes de que lo decapitara en la vía Ostiense, el mismo año y día en que crucificaron "patas para arriba" a San Pedro.
Ahí pongo dos vistas de las catacumbas. No son tan impresionantes como las romanas pero tienen mucho encanto y conservan varios frescos e inscripciones en griego antiguo, sobre todo las de Santa Ágata que se hallan a pocos metros de las de San Pablo.
También otras imágenes de la ciudad de M'dina, antes unida a Rabat, y luego separada de ella administrativamente y por una murralla también. M'dina es una de las ciudades de más homogeneidad en el Mediterráneo. Se le llama "la Ciudad Noble" porque en ella reside desde tiempos inmemoriales la nobleza de Malta en oposición a los intrusos Caballeros de la Orden que vinieron un día a perturbarles la paz y a limitar su poderío en la isla.
M'dina
De todos los santos San Pablo es el que debería ser proclamado "Santo Patrón del Turismo". Cuando uno lee su vida se pregunta cómo pudo dar tantos viajes de ida y vuelta entre Macedonia, Atenas, Corinto y otras ciudades e islas griegas; Cilicia, Frigia, Licia y otras provincias de Asia Menor y todo el territorio de Siria, Fenicia y Palestina, en donde no se perdía una celebración cristiana ni paraba de predicar el Evangelio. Sin contar el viaje a España, del que todavía existen dudas. Antes de su encarcelamiento en el año 58 dC (San) Pablo se hallaba en Corinto (Peloponeso) y de pronto decide regresar a Jerusalén para celebrar la Pentecostés con los suyos. Mucho me gustaría que el apóstol me pasara el "tuyau" de su tour operador porque a mí a veces las fechas y las disponibilidades en hoteles y aviones no se me dan tan fácil.
El caso es que después de que San Pablo regresara por tercera vez a Jerusalén, los judíos logran sacarlo de circulación metiéndolo en la prisión de Cesarea. Pero como Pablo era ciudadano romano no podía ser ni azotado ni juzgado por un tribunal judío, así que pudo apelar al César y salir, al cabo de dos años, de la prisión y hacerse conducir a Roma para que allá lo juzgaran.
Y es ahí donde el azar, recurrente en la vida de muchos santos, hace que el futuro San Pablo llegue a la isla de Malta, en donde naufraga la embarcación que lo conducía al Lazio. En Malta ocurrirá el episodio de la mordedura de la víbora. (San) Pablo, auxiliado por (San) Lucas y otros evangelizadores que iban en la comisión de embullo para Roma, aprovechan esta imprevista escala para curar a algunos enfermos y convertir de paso a parte de la población de la isla, incluido el gobernador romano de entonces que se llamaba Publius.
Ahora bien, en la ciudad maltesa de Rabat-M'dina (nombre heredado de la ocupación árabe de la isla entre 870 y 1090), se encuentra la célebre gruta en donde supuestamente se escondió (San) Pablo. Allí rezó y también lo hizo siglos después su tocayo Juan Pablo II. Pero lo curioso no es la gruta de San Pablo que, fuera del carácter místico, no tiene gran interés; sino las célebres Catacumbas llamadas de San Pablo que están a unos pasos de la gruta. Aunque no existían en el momento en que (San) Pablo se encuentra en Malta supongo que se les ha llamado así por ser el apóstol el que introdujo la moda de este tipo de enterramiento propio de los cristianos viejos. También en la ciudad de La Valetta, la Iglesia de San Pablo el Náufrago exhibe dos reliquias relacionadas con la vida del santo. Una de ellas es un fragmento de la columna romana en la que fue atado antes de que lo decapitara en la vía Ostiense, el mismo año y día en que crucificaron "patas para arriba" a San Pedro.
Ahí pongo dos vistas de las catacumbas. No son tan impresionantes como las romanas pero tienen mucho encanto y conservan varios frescos e inscripciones en griego antiguo, sobre todo las de Santa Ágata que se hallan a pocos metros de las de San Pablo.
También otras imágenes de la ciudad de M'dina, antes unida a Rabat, y luego separada de ella administrativamente y por una murralla también. M'dina es una de las ciudades de más homogeneidad en el Mediterráneo. Se le llama "la Ciudad Noble" porque en ella reside desde tiempos inmemoriales la nobleza de Malta en oposición a los intrusos Caballeros de la Orden que vinieron un día a perturbarles la paz y a limitar su poderío en la isla.